Hace poco encontré en un caminar sin rumbo una frase tan sincera y realista pero a su vez sencilla y directa, un mensaje inmenso con un toque minimalista sobre una pared entintada en blanco que se degradaba a gris por la contaminación de una ciudad, las letras no tenían una tipografía definida y se entendía perfectamente que lo importante no era la estética sino el impacto y profundidad que causaría el mensaje, tampoco existía una firma, nada, cualquiera pudo haberlo escrito, te dejaban con el misterio para que el significado tuviera permanencia universal y colectiva. Me pareció una manera cautivante de dejar que tu mente reflexionara durante todo el día lo ya transmitido, estuve mirando ese muro por lo menos quince minutos, no existía nada en especial en él, simplemente era el efecto de sus letras los que hacían que permanecieras ahí analizando y sufriendo una serie de analepsis preguntandote ¿Qué hubiera cambiado en tu pasado si hubieras leído aquello antes?
Para que entiendan mejor a que me refiero aquel muro decía...
"Cuando dejas de idealizar, ves a la verdadera persona"
Me pareció tan cierto que en cuanto lo leí me sumergí por completo en mis empolvados recuerdos, sé que muchos dicen que el hubiera no existe pero no hace daño fantasear con el, la cuestión es que mi mente me bombardeo con tantas preguntas como ¿Qué pudo haber pasado si no me hubiera idealizado con esa persona? ¿Qué pudo pasar si no hubiera idealizado a tal persona como mi felicidad? ¿Qué tal si en realidad no se cual es mi ideal y por eso me la paso idealizando mi vida en otras personas, cosas o lo que sea? Quizá no hubiera cometido los errores que me tocó vivir, si antes de idealizar hubiera visto a la persona o la situación, ante esto no he dejado de pensar que toda mi vida es un engaño y como resultado esto me a orillado a seguir idealizando mi vida en un futuro, lo cual es muy triste porque soy mi idealización de persona y no la persona que en realidad debo ser.
